PRINCIPIOS Y PRIORIDADES

De un autor anónimo encontré este sabio aforismo: Pierdes tu riqueza y pierdes poco; pierdes tu salud y pierdes algo; pierdes tu paz interior y lo has perdido todo. Paz interior es el verdadero nombre de una felicidad que siempre es esquiva para aquellos que sacrifican la tranquilidad del alma seducidos por el poder y el poseer.

Paz interior es el tesoro que se disfruta cuando se centras la vida en buenos principios y buenas prioridades. Qué son los principios? Son dos o tres valores especiales que iluminan y orientan tu conducta y que nunca negocias por nada. Sobre esos valores fundamentales se apoyan tus acciones y así actúas con buena conciencia y buen corazón.

Un estudio realizado por el psicólogo Abraham Maslow con personas realizadas y felices mostró que todas ellas eran fieles a estos cuatro principios:

1. Se amaban y amaban de verdad.

2. Eran personas íntegras.

3. Eran seres profundamente espirituales.

4. Estaban comprometidas con una misión de servicio.

Guiadas por el amor, la integridad, la espiritualidad y el servicio, esas personas tenían de primero lo primero y armonizaban su vida familiar con el trabajo; en otras palabras, eran fieles a unas buenas prioridades. Algo poco común en un mundo que idolatra el dinero y en el que es fácil sacrificar los principios y el hogar por poder, fama y apariencias.

Leía en la oficina de un abogado, adicto al trabajo, este escrito que él había enmarcado pero que no practicaba:

“En su juventud perdió su salud buscando dinero, en su madurez perdió su dinero buscando salud, y ya sin dinero y ya sin salud ahí va Romero en su ataúd.”

Suena cruel pero esa es la radiografía de aquellos que en lugar de trabajar para vivir viven para trabajar. Por eso se necesita buenos principios y buenas prioridades ya que son la clave para tener lo que hoy se llama calidad de vida.

Vivir es lograr que la paz interior sea un regalo para los seres que amas, los que te aman y para ti mismo. Y algo más: si de verdad queremos disfrutar de paz interior, debemos rodearnos de amigos o aliados que compartan estos mismos principios y tengan las mismas prioridades. Solo con amigos que valoren el amor, la integridad, la espiritualidad y el servicio se puede nadar contra la corriente y alcanzar lo que ganan quienes se aventuran a subir al Himalaya: conquistar una meta por más dificultades que se presenten y hacerlo rodeado de un equipo como soporte.

Para salvar a la familia también hace falta alianzas estratégicas. Porque la Familia es la empresa más importante.

Para todos los Colegas, también es una empresa la Colegiatura, y nos hace falta, las alianzas en primer plano y en segundo las estrategias, esas que no hemos podido poner en práctica, por falta de empuje y apoyo a lo nuestro; es que lo afuera es lo que vale y es lo que sirve, nos falta, además, de los cuatro principios mencionados – amar de verdad, ser personas íntegras, ser profundamente espirituales y comprometidos con una misión de servicio -, nos falta identidad.

ORLANDO BOHÓRQUEZ PABÓN

Abogado Especialista

Derecho Penal y Criminología

Sistema Penal Acusatorio

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